domingo, 18 de mayo de 2014

El agua y nosotros



El agua es el elemento de la naturaleza más importante que existe. Si no hay agua no hay vida. La composición del agua es H2O, es decir dos moléculas de hidrógeno y 1 de oxígeno.

El Agua en nuestro planeta:

El agua en nuestro planeta se encuentra de los tres estados: Sólido, líquido y gaseoso. Y la cantidad de agua existente en la Tierra es la que hay y debemos cuidarla como el tesoro que es.
El agua de la Tierra, se conoce como hidrosfera y  cubre un 71% de la superficie de nuestro planeta, es decir ¾ de la Tierra. Pero de esta cantidad casi toda es salada y se encuentra en los mares y océanos, y sólo un 3% es agua dulce, y la mayoría de esta agua dulce está en los polos en forma de hielo.

Gráfico del agua en nuestro planeta


El ciclo del agua

El agua de nuestro planeta no está quieta, está en continuo movimiento que se conoce como el ciclo del agua.
Para el movimiento del agua es imprescindible la energía del Sol, la estrella alrededor de la cual gira nuestro planeta.
El ciclo del agua comienza cuando el sol calienta parte del agua superficial de la tierra y esta se evapora. Este vapor al subir  pasa a la atmósfera donde se enfría y se condensa formando nubes que más tarde caen sobre la tierra en forma de lluvia, granizo o nieve. Aunque el agua también sube a la atmósfera a través de la transpiración de los seres vivos y las plantas. Y también vuelve a la tierra en forma de rocío, helada o niebla.
El agua que vuelve a la tierra puede tener varios destinos:
Una parte vuelve a ser evaporada casi inmediatamente y sube a la atmósfera
Otra parte cae en pequeños arroyos o surcos para volver a los ríos y a los océanos.
Otra parte se filtra a capas inferiores del suelo que tras atravesar capas freáticas alcanzará otra vez los ríos y océanos.

El ciclo del agua y el medio ambiente

Pero ¿Qué ocurre cuando el agua que se evapora se condensa en un espacio de la atmósfera que  está contaminado por gases debido al uso de combustibles fósiles por parte de las industrias? Pues que las partículas contaminadas de esos gases se adhieren a las gotas de agua, que al caer en forma de lluvia pueden dañar el suelo de la tierra. Y además esas partículas pasarán a formar parte de la cadena alimentaria ya que los cultivos y los animales usaran esa agua contaminada.
Los contaminantes de la lluvia son capaces de moverse de un continente a otro arrastrados por los vientos.
¿Será esa la causa de algunas de las enfermedades actuales?

El agua en el ser humano

El ser humano está formado en más de un 60% de agua, que se encuentra dentro de las células y en la sangre.

Pero toda esta agua no está de forma permanente en nuestro organismo. Durante el día la persona pierde agua al orinar, al defecar, al sudar y al respirar; y por tanto hay que reponerla  mediante la ingesta de agua y comida (la comida sólida también aporta líquidos al organismo).

Pero ¿por qué es tan importante el agua para nuestro cuerpo?

El agua no es un nutriente y por tanto no nos aporta energía, pero es fundamental para que los alimentos que comemos se transformen en los nutrientes que necesitamos y para que junto al oxígeno sean transportados a las células de todo nuestro organismo. Además, también retira los desechos que no necesitan las células y los elimina de nuestro cuerpo a través de la orina.

También nos permite mantener una temperatura regular en nuestro cuerpo a través de la transpiración y sudoración de nuestra piel. Por eso cuando la temperatura exterior es muy alta sudamos.

Si una persona está más de 5 días sin beber puede sufrir graves problemas de salud irreversible e incluso morir.

sábado, 3 de mayo de 2014

El calentamiento global

Desde hace años toda la comunidad internacional sabe que el calentamiento global es un problema real, tanto, que hace tiempo se firmó el famoso protocolo de Kyoto, en el que se comprometían a reducir la emisión de gases que producen el efecto invernadero en La Tierra, es decir, los gases que evitan que la energía que recibe nuestro planeta del sol sea devuelta otra vez al espacio y por lo tanto provoca el calentamiento de nuestra atmósfera.

Simulación del efecto invernadero

Pero que se conozca el problema no ha hecho que se cumpla lo acordado en Kyoto y recientemente los expertos del IPCC (Panel Intergubernamental sobre el Calentamiento Climático) han alertado a la comunidad internacional de que el tiempo para solucionar el problema se está agotando, y señalan como única respuesta el cambio del sistema económico actual.

Para concienciarnos de que realmente hay que cambiar el sistema económico actual hay que tener muy presente los verdaderos efectos del calentamiento global:

CMAP sobre los efectos del calentamiento global.


Ya conocemos el problema, qué lo causa y cuales son sus efectos, y según los expertos del IPCC también sabemos la solución: cambiar el sistema económico actual. Una gran parte de ese cambio debe venir de los gobiernos, haciendo leyes que faciliten el uso de energías renovables y sistemas de producción sostenibles, entre otras cosas.

Pero como ciudadanos ¿qué podemos hacer cada uno de nosotros?:
-Reciclar
-Concienciar a la gente que nos rodea
-Usar más el transporte sostenible (ej. la bici) y, si no es posible, el transporte público
-Evitar el consumismo
-Comprar productos locales
-Consumir productos ecológicos 
-etc...
-Y, sobre todo, pedir a los gobiernos que faciliten estas conductas.

Un ejemplo de como los gobiernos pueden ayudar a que los ciudadanos nos comprometamos con el medio ambiente es la construcción de carriles bicis que sirvan para ir de las casas a los lugares de trabajo (no como en la mayoría de ciudades españolas que los carriles bicis se hacen para ir de paseo).  Que además de suponer un beneficio en el ahorro energético y una disminución en las emisiones de CO2, tendría beneficios en el tráfico de las ciudades, el ruido y la salud.